Si estás buscando regalos de empresa para obsequiar a tus clientes o proveedores y no sabes qué elegir, el material de oficina puede convertirse en tu aliado. Se trata de un segmento de productos que suele pasar desapercibido, ya que, a menudo, cuando pensamos en un regalo publicitario nos vienen a la mente otro tipo de elementos más llamativos, como camisetas o gorras.
Sin embargo, los pequeños productos de escritorio, como gomas de borrar, blocs de notas, marcapáginas para libros o reglas también pueden personalizarse con el logo o la marca de tu empresas y tienen muchas ventajas. Te contamos cuáles:
-. Su utilidad: pese a pesar desapercibidos, estos productos son muy útiles y, en muchos casos, incluso necesarios en cualquier oficina. Por ello, se convierten en indispensables. Si los personalizas con tu logotipo y marca estarás regalando un obsequio útil, que será muy bien recibido por sus destinatarios.
-. Su precio: otra de las ventajas del material de escritorio como regalo publicitario es, sin duda, su precio. Existe una gran variedad de productos (como reglas, gomas de borrar, blocs de notas, marcadores de libros o cúteres) que puedes conseguir por menos de 0,30 céntimos la unidad. Son, por lo tanto, ideales para aquellos que tienen un presupuesto limitado y para los que quieren comprar muchas unidades sin una gran inversión.
-. Su variedad: la variedad de productos de escritorio es muy amplia, lo que permite variar y no regalar dos veces el mismo obsequio o ofrecer más de un regalo a la vez, ya que sus precios suelen ser muy asequibles.
-. Su alta capacidad de penetración: al ser productos de uso habitual y cotidiano, este tipo de elementos aseguran una gran penetración de marca, puesto que suelen ir de mesa en mesa y pasan por varias manos,. Son, por lo tanto, una buen publicidad para cualquier empresa.
-. Su durabilidad: otra ventaja de los regalos publicitarios de escritorio es su durabilidad. Reglas, marcapáginas, cúteres… son productos de larga duración que, a diferencia de otros regalos publicitarios como bolígrafos, no tienen fecha de caducidad pese a su uso. Ello permite que nuestra marca permanezca mucho más tiempo en los escritorios de nuestros clientes, por lo que nuestra publicidad será más rentable.